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HOY Os voy a revelar un pequeño secreto...
Por mucho que te mires en el espejo nunca vas a conseguir verte a ti mismo, jamás aprenderás quién eres ni tus posibilidades, cuando en realidad nuestra piel, músculos y huesos son el recipiente de algo con mucho más potencial.
A la pregunta de cómo conocerse a uno mismo, hay que responder a otra: ¿Realmente te interesa conocerte?, pues puede que no seas quien esperas ser.
Una de las varias maneras de averiguar algo mas de ti, es llevar el cuerpo y mente al límite. Cuando tus piernas ya no quieren seguir corriendo, tus brazos caen por su propio peso por el esfuerzo físico y tu corazón esta apunto de salirse de órbita, éstos bombardean tu cabeza con mensajes para abandonar la carrera. Éste es el momento importante, hacer caso omiso a esos telegramas físicos y empezar a dominar tu cuerpo exhausto con tu mente durante un poquito mas, y es aquí, en este preciso instante cuando empieza a brillar tu interior, y da igual quién sea el que esta mirándote desde el reflejo del impoluto espejo, pues ya no te hace falta mirarte ahora sientes quien eres.
El resultado de todo este proceso lo encontraras a la mañana siguiente, cuando no seas capaz de moverte de la cama porque tu cuerpo a desconectado totalmente de tu mente a modo de venganza, por lo que ahora tendrás un mente ligera y libre donde fluirán todo tipo de ideas con mucha mas facilidad.
Es cierto, por mucho que nos esforcemos, en el espejo solo veremos nuestro enatiómero. Algo muy parecido, pero que a efectos prácticos se comporta distinto. Yo nunca he llevado mi cuerpo hasta el límite.
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